Esmeraldas colombianas en el mercado europeo y asiático
Para el gremio esmeraldista e incluso para los conocedores de la compra y venta de esta joya verde, no es un secreto que los mayores inversionistas de las esmeraldas naturales colombianas son asiáticos y europeos.
Quizás este gran interés de los mercados externos se deba a que hoy Colombia es uno de los principales productores de esmeraldas de alta calidad del mundo. Es decir, en 2020 el sector minero representó el 25 por ciento de las exportaciones colombianas por valor de 7.700 millones de dólares y el sector esmeraldero representó el 1 por ciento de las exportaciones mineras.
A continuación hablaremos un poco de estos dos mercados, el europeo y el asiático y profundizaremos un poco más en sus intereses en la compra de esmeraldas.
Mayores compradores de esmeraldas colombianas
Definir el porcentaje de turistas que viajan día a día a Colombia exclusivamente para adquirir esmeraldas colombianas es incierto, pues muchos de ellos buscan comprar esmeraldas montadas en joyería e incluso no buscan más que simple turismo.
Sin embargo, según la Federación Colombiana de Esmeraldas, para 2021 se establecieron algunas nacionalidades para quienes compran o destinos a los que se exportan grandes cantidades de esmeraldas colombianas, entre ellos se encuentran:
- Asiáticos: la compra de esmeraldas predomina en países como China, India y Tailandia. En China se compra el 80% de las esmeraldas colombianas, algunas de estas gemas terminan en ciudades como Hong Kong, Beijing y Shanghai.
En cuanto a India y Tailandia, estos representan sólo el 6% de las compras de esmeraldas naturales colombianas.
- Estadounidenses: Otro de los destinos y nacionalidades en busca de esmeraldas colombianas es Estados Unidos, que se lleva el 8% de las ventas de gemas verdes del país.
- Europeos: últimos y aunque van en descenso tras la reciente pandemia de COVID 19, los países y nacionalidades europeas adquieren en un 6% las esmeraldas colombianas.
mercado de esmeraldas colombianas
En Europa existe una importante demanda de esmeraldas colombianas, especialmente en países como España, Italia y Francia, donde existe una larga tradición de alta joyería y alta costura.
Las esmeraldas colombianas se utilizan a menudo en la fabricación de joyas de alta calidad, como anillos, aretes y collares, y pueden ser muy valoradas por coleccionistas y amantes de las piedras preciosas.
Sin embargo, la demanda puede verse afectada por factores económicos y políticos, así como por las tendencias del mercado, que, como se mencionó anteriormente, se vieron afectadas por la pandemia de COVID-19.
Mercado asiático y esmeraldas colombianas
Las esmeraldas colombianas también tienen presencia en el mercado asiático, aunque en menor medida que en el mercado europeo y estadounidense.
En países como Japón, Corea del Sur y China, existe una creciente demanda de esmeraldas colombianas, especialmente entre consumidores de clase media y alta que buscan joyas exclusivas y de alta calidad.
De todos los países asiáticos, sin embargo, hay que destacar a China en el mercado de esmeraldas colombiano. La demanda de esmeraldas colombianas en China ha crecido significativamente, especialmente entre algunos diseñadores y joyeros chinos que han comenzado a utilizar esmeraldas colombianas en sus diseños debido a su belleza y rareza.
Pese a ello, la competencia en el mercado asiático es alta debido a la presencia de otras piedras preciosas como el jade y el zafiro, muy valoradas en la cultura asiática, especialmente en China e India.
Aún así, las esmeraldas colombianas tienen buena reputación en Asia y son conocidas como las de mejor calidad del mundo.
Paula Bonilla
Comunicador social y periodista de la Universidad Sergio Arboleda de Colombia. También es joyera y le apasiona aprender constantemente sobre gemas preciosas y alta joyería nacional.
Actualmente trabaja para una de las joyerías más importantes de Bogotá, Emerald by Love. Esta joyería cuenta con más de 40 años de experiencia y cuenta con 2 sucursales físicas en la ciudad capital de Colombia, ubicadas en el centro de la ciudad.
