Mitos y realidades de las esmeraldas colombianas

En el mundo de la joyería, existen muchas preguntas frecuentes sobre las esmeraldas colombianas. Esta gema, conocida por su belleza y su energía única, también genera dudas debido a su estructura natural y a los cuidados que requiere. Por eso, es común encontrar mitos que confunden a quienes buscan llevar una esmeralda colombiana con seguridad.

En este artículo aclararemos las dudas más comunes, desmontaremos creencias equivocadas y te daremos información clara para que puedas disfrutar tu joya con esmeralda sin temores.

Esmeraldas colombianas: características excepcionales

Las esmeraldas colombianas son reconocidas mundialmente por su color verde intenso, su brillo interior y su formación geológica única. A diferencia de otras gemas, su belleza proviene de inclusiones naturales llamadas jardines, que les dan identidad y autenticidad. Lejos de ser imperfecciones, estos rasgos son parte del encanto y personalidad de cada piedra.

Además, las esmeraldas colombianas son apreciadas por su rareza. Se forman a través de procesos hidrotermales profundos que combinan presión, minerales y tiempo, dando lugar a gemas de características incomparables. Esta compleja formación las hace valiosas y también más sensibles que otras piedras preciosas, razón por la cual los cuidados deben ser adecuados.

20 Mitos y realidades de las esmeraldas colombianas 

• Mito: Una esmeralda no puede tocar el agua.
  Realidad: Puede mojarse, pero no debe exponerse a inmersiones prolongadas ni a químicos.
  
  

• Mito: Las esmeraldas son extremadamente frágiles.
  Realidad: Son resistentes sobre joyería, pero su estructura interna las hace sensibles a golpes fuertes.
  
  

• Mito: Se pueden limpiar con máquinas de ultrasonido.
  Realidad: Está totalmente prohibido; puede causar fracturas internas.
  
  

• Mito: Las esmeraldas se rayan con facilidad.
  Realidad: Tienen buena dureza, pero sí pueden rayarse si se rozan con metales duros o diamantes.
  
  

• Mito: El aceite de la esmeralda se pierde al poco tiempo.
  Realidad: Dura muchos años si la piedra recibe un cuidado adecuado.
  
  

• Mito: Mojarla ayuda a detectar si es falsa.
  Realidad: La autenticidad solo la confirma un gemólogo o laboratorio.
  
  

• Mito: Se puede usar la esmeralda durante todo tipo de actividad física.
  Realidad: Es mejor retirarla para evitar golpes accidentales.
  
  

• Mito: Las esmeraldas pueden exponerse al calor sin problema.
  Realidad: El calor extremo puede afectar tratamientos causando burbujas internas.
  
  

• Mito: No pasa nada si duermes con tu anillo de esmeralda.
  Realidad: El roce constante puede desgastar el engaste.
  
  

• Mito: Todo brillo es señal de calidad.
  Realidad: El brillo depende del corte y transparencia, no solo del tratamiento.
  
  

• Mito: Las esmeraldas jamás deben moverse dentro de su montura.
  Realidad: Si vibra o se mueve, requiere ajuste inmediato, no significa que esté dañada.
  
  

• Mito: El aceite es señal de mala calidad.
  Realidad: Es un tratamiento tradicional y aceptado en esmeraldas naturales.
  
  

• Mito: Las esmeraldas son resistentes a los químicos.
  Realidad: No, debe evitarse el uso de perfumes, cremas y jabones sobre la joya pues pueden afectarlas.
  
  

• Mito: Una esmeralda pierde valor si tiene inclusiones.
  Realidad: Las inclusiones son parte de su identidad y pueden incluso aumentar su valor.
  
  

• Mito: Si una esmeralda tiene una pequeña fractura, inevitablemente se romperá.
  Realidad: Muchas inclusiones son estables y no comprometen la integridad de la gema, pero si la fisura es muy superficial puede romperse del todo.
  
  

• Mito: El color puede desvanecerse con el tiempo.
  Realidad: El color natural de una esmeralda colombiana es estable, sin embargo puede desgastarse por el mal uso.
  
  

• Mito: Se pueden limpiar con cualquier tipo de paño.
  Realidad: Lo ideal es usar un paño suave y libre de fibras abrasivas.
  
  

• Mito: Las esmeraldas no se deben usar a diario.
  Realidad: Pueden usarse todos los días si se manipulan con cuidado.
  
  

• Mito: Si una esmeralda pierde brillo, significa que está dañada.
  Realidad: Generalmente solo necesita una limpieza suave.
  
  

• Mito: El engaste no influye en el cuidado.
  Realidad: Un buen engaste protege la piedra y prolonga su durabilidad.

Emerald By Love: te asesoramos para encontrar las mejores esmeraldas

En Emerald By Love sabemos que una esmeralda es mucho más que una joya: es una inversión, un símbolo y una pieza que merece cuidados expertos. Por eso te acompañamos en cada paso, desde la elección de la gema perfecta hasta el mantenimiento adecuado para que tu joya dure toda la vida.

Si buscas una esmeralda colombiana auténtica, con asesoría profesional y diseños personalizados, estamos para ayudarte.

Paula A. Bonilla

Comunicadora social y periodista de la Universidad Sergio Arboleda en Colombia. Apasionada por aprender constantemente sobre gemas preciosas y alta joyería nacional. Actualmente, trabaja para una de las joyerías más importantes de Bogotá, Emerald by Love. Esta joyería cuenta con más de 40 años de experiencia en esmeraldas y tiene dos sucursales físicas en la capital de Colombia, ubicadas en el centro de la ciudad.