Minas de esmeralda en Egipto
Las esmeraldas, maravillosas piedras preciosas que han cautivado a millones de personas a lo largo de los siglos, se han convertido en el mayor desafío científico e histórico para quienes buscan conocer el origen de las minas en las que se inició su explotación en el Antiguo Egipto.
Tras varios estudios realizados desde el año 2000 y que finalizaron en 2020, durante la primera intervención arqueológica del "Proyecto Sikait" , proyecto dirigido por el catedrático Joan Oller Guzmán de la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB), la comunidad científica tiene muy cerca a la que podría ser la cuna de las esmeraldas en el Alto Egipto, la mina Wadi Sikait.
A continuación, te contaremos los principales hallazgos de esta investigación, y además, conocerás algunas curiosidades sobre las esmeraldas en la época romana. ¡Vamos a ver!
Wadi Sikait, el origen de la esmeralda en Egipto
Situado en el desierto oriental de Egipto, a 45 kilómetros de la costa del Mar Rojo, los arqueólogos han descubierto el que se considera el depósito de esmeraldas más grande y mejor conservado de la época romana, Wadi Sikait.
Allí se descubrió que la actividad minera estaba casi en su totalidad ligada a creencias religiosas. Lo anterior, ya que al centrarse en tres ejes arquitectónicos de la época, se encontraron hallazgos que demuestran esta teoría en tres estructuras diferentes:
– Primera estructura: conocida por los arqueólogos como el “Edificio Administrativo”, este sitio fue casi con certeza un templo que estuvo activo entre los siglos I y IV-V. Allí se recuperaron 19 monedas, junto con otros elementos que indican un uso ritual dentro del principal depósito de esmeraldas de la época.
– Segunda estructura: el llamado “Gran templo”, una de las estructuras mejor conservadas de Wadi Sikait, también contenía objetos de uso religioso como algunos huesos y amuletos. La estructura estuvo en funcionamiento entre los siglos IV y V d.C., aunque es muy probable que los santuarios internos fueran utilizados con anterioridad.
– Tercera estructura: el complejo conocido como “Edificio de las Seis Ventanas”, quizás un espacio residencial, incluía una cavidad interior más antigua. De todas las estructuras mencionadas anteriormente, esta es quizás la que estuvo más relacionada con la actividad minera de esmeraldas.
¿Cómo eran las minas de esmeraldas?
Según el mismo estudio revelado anteriormente, y tras analizar la mayoría de estos espacios en Wadi Sikait, se concluyó que casi ninguna de las estructuras era propiamente un punto de extracción de esmeraldas, ya que se trataba principalmente de espacios de almacenamiento, religión o vivienda. .
Sin embargo, el estudio de las estructuras subterráneas presentes en Wadi Sikait y sus alrededores ha permitido documentar varios espacios mineros de berilio (esmeralda).
El análisis detallado de algunas de las minas reveló evidencia de su estructura, tipología y evolución, incluido el descubrimiento de la primera inscripción registrada jamás encontrada en una antigua mina de esmeraldas (datos no revelados en su totalidad después del estudio).
Por ahora, sólo se han informado pequeños aspectos de la investigación, sin embargo se cree que las excavaciones en Wadi Sikait proporcionarán evidencia clave en el futuro para determinar cómo se explotaron las minas de esmeraldas.
Así, las futuras investigaciones arqueológicas en el lugar se centrarán sobre todo en documentar los complejos mineros para obtener una visión completa del proceso de extracción y comercialización de las esmeraldas en la época romana, lo que aportará un mayor contexto histórico sobre esta preciosa joya.
Creencias sobre las esmeraldas en Egipto.
Aunque el Antiguo Egipto fue el hogar de las esmeraldas, no fue lo único que dio a estas piedras su amplio atractivo. Para los egipcios su color verde intenso representaba:
- Ser renacido
- Fertilidad
- Poder
- Y lo más importante, la eterna juventud.
Las esmeraldas se utilizaban en rituales funerarios como recordatorio de la juventud, pero también se creía que tenían la capacidad de tratar enfermedades oculares, posiblemente relacionadas con sus supuestas propiedades clarividentes.
Cleopatra y las esmeraldas, la piedra del Alto Egipto
Quizás la más ferviente admiradora de las esmeraldas en la época romana fue Cleopatra, ya que adoraba estas gemas. Su amor por ellos estaba ligado a las creencias y épocas del Antiguo Egipto.
Cleopatra estaba tan obsesionada con las esmeraldas que se cree que reclamó la propiedad de algunas de las minas más importantes que pertenecían a los griegos porque quería estas piedras para ella.
Se dice que Cleopatra incluso tenía la costumbre de ofrecer a los dignatarios visitantes un regalo especial: una gran representación de ella misma tallada en grandes esmeraldas.
Paula Bonilla
Comunicador social y periodista de la Universidad Sergio Arboleda de Colombia. También es joyera y le apasiona aprender constantemente sobre gemas preciosas y alta joyería nacional.
Actualmente trabaja para una de las joyerías más importantes de Bogotá, Emerald by Love. Esta joyería cuenta con más de 40 años de experiencia y cuenta con 2 sucursales físicas en la ciudad capital de Colombia, ubicadas en el centro de la ciudad.